jueves, 25 de febrero de 2016

El Tigre, martes 23 de Febrero de 2016
Ronny Padrón
Democracia Cristiana Hoy
Llegamos al ¨Sálvese quien pueda¨
Precisamente lo que el movimiento demócrata nacional  pretendió evitar con el 6D, hoy es una realidad.  Los venezolanos de a pie se sienten abandonados  a merced del socialismo y su dictadura, huérfanos de alternativa politica válida ante un régimen que a diario le mata de hambre, enfermedad  y  a manos del hampa, a una velocidad cada vez  más vertiginosa.

No existe crimen, ineptitud,  inmoralidad o desvergüenza política por parte del socialismo en gobierno, capaz de  sorprender al venezolano oprimido. Como tampoco sorprende el silencio de quienes están llamados a liberarlo.

Así entonces resulta pertinente el testimoniar sobre la tragedia que se cierne sobre nuestro país, aún mayor que la vivida a partir del 11 de abril de 2002. Dicha tragedia tendría por fundamento  la profundización del presente caos sumada a la  indefensión de una sociedad  que en medio de su lógica desesperación por sobrevivir brindará el apoyo – por acción u omisión-  a ¨cualquiera¨ que  le libre  de esa  ¨muerte segura¨ implícita en la continuidad  del régimen socialista.

El  ¨gendarme necesario¨ toca otra vez  las puertas del poder en  Venezuela, y cada día son más numerosos los dispuestos a atender ese llamado. La democracia aún puede reaccionar, pero debe hacerlo ya ¡Ni Un Paso Atrás¡ Ora y labora.


miércoles, 17 de febrero de 2016

El Tigre, domingo 14 de febrero de 2016
Ronny Padrón
Democracia Cristiana Hoy
Estado de Necesidad Nacional

En la Venezuela de hoy cabe la pretensión de amparar al común de los venezolanos en el Estado de Necesidad, figura jurídico-penal consagrada en el artículo 65  ordinal  3° literal ¨d¨ del Código Penal Venezolano vigente, como  causa de justificación eximente de responsabilidad penal, en los siguientes términos: ¨ No es punible, el que obra constreñido por la necesidad de salvar su persona, o la de otro, de un peligro grave e inminente, al cual no haya dado voluntariamente causa, y que no pueda evitar de otro modo¨.

Cómo refutar políticamente la antedicha  reivindicación  cuando observamos la plena adecuación de todos y cada uno de los supuestos que le conceden pertinencia, a saber: A) Un peligro grave, actual o inminente: Se entiende por peligro grave el que amenace la vida de la persona o su integridad física. El peligro actual es el que existe aquí y ahora, y el peligro inminente es el que ya se va a dar. Desde el 11 de abril de 2002, inicio formal de esta dictadura, el pueblo venezolano muere de hambre, enfermedad y a manos del hampa, en proporciones solo vistas en guerras de exterminio, dicho por organismos internacionales especializados.

B) Que la persona no haya provocado dolosamente el peligro: Para que proceda el Estado de Necesidad es necesario que la persona que invoca a su favor esta causa de justificación eximente de responsabilidad penal,  no haya dado voluntariamente causa al peligro.  Es el caso, que esa mayoría electoral que en 1998 votó  por Hugo Chávez para Presidente de la República de Venezuela, desconocía que tal mandato sería empleado fraudulentamente para esclavizarnos y/o exterminarnos bajo el socialismo.

C) Imposibilidad de evitar el mal y/o peligro, por un medio que no sea el sacrificio de un bien jurídico ajeno. Es un hecho público, notorio y  comunicacional, que la supervivencia del pueblo venezolano  implica la inmediata salida del poder, del usurpador Nicolás Maduro Moros. Para ello los artículos 333 y 350 de la Carta Magna nos imponen la obligación patriótica de actuar en consecuencia. El no hacerlo acarreará graves responsabilidades históricas, sobremanera para los recién electos parlamentarios de nuestra Mesa de la Unidad Democrática, aún en deuda con esta Venezuela que agoniza ¡NI UN PASO ATRÁS¡ Ora y Labora.







martes, 9 de febrero de 2016

Ronny Padrón.
Democracia Cristiana Hoy
¡Prisioneros políticos no, secuestrados¡

Mucha sangre, sudor y lágrimas se ahorraría Venezuela  si la dirigencia demócrata nacional que nos ha tocado en suerte  tomara la decisión de llamar las cosas por su nombre. Desde el 11 de abril de 2002, inicio formal de esta dictadura socialista, comenzó también la aplicación de una  muy conocida tesis: ¨La cohabitación ¨, por parte de una dirigencia demócrata nacional que llamada a confrontar y liberar a Venezuela de una tiranía gobernante peor que  la anterior liderada por el general Marcos Pérez Jiménez; pero que en base a la mentada teoría solo ha perseguido ¨convivir¨ con el régimen, conforme a las reglas de juego  que este le señale, ello –suponemos- hasta que su eventual inviabilidad posibiliten su fin. Bajo ese esquema de ¨trabajo¨ perdimos 14 años.

Ahora bien, por sobre la tragedia implícita en estos años bajo socialismo, con pérdidas humanas y materiales solo concebibles en tiempos de guerra  mundial, se impone la necesidad de acabar con este horror en términos perentorios, antes que la miseria de Venezuela alcance magnitud superior. Esta verdad, imposible de ocultar por la fuerza de sus efectos, pareciera aún difícil de internalizar por parte de  nuestra dirigencia demócrata nacional  hoy representada en la bancada de la MUD, visto su actual accionar.

Decimos lo anterior en virtud del mes transcurrido contado a partir del 5 de enero, con la juramentación de nuestros  112 diputados demócratas, todo un mes, que a la fecha presente sólo tiene como dato sorpresa la desincorporación ¨consciente y voluntaria¨  de 3 de esos parlamentarios, ello a objeto de ¨merecer¨ el reconocimiento institucional de los restantes órganos del Poder Público Nacional, todos  bajo posesión del PSUV; pues de resto,  absolutamente nada ha cambiado en medio de esta guerra de exterminio que nos declaró el socialismo.

Incluso ya resulta evidente que nuestros 78 héroes demócratas, secuestrados por la dictadura socialista en virtud de su valiente resistencia constitucional, no verán la libertad mientras el usurpador  Nicolás domine en Miraflores, prevalido como está de su Poder Judicial en específico su Sala Constitucional.

Ante ello no queda más que jugar nuestras  cartas, a saber: Activar la salida constitucional de la dictadura gobernante, a la brevedad posible, con base en la mayoría súper-calificada con la que aún cuenta nuestra bancada demócrata, salida que entendemos será la Enmienda Constitucional.

Por ende, llegó la hora de llamar las cosas por su nombre, sin temer ni ofender. Que el mundo entero comprenda a cabalidad  la naturaleza del régimen  que mantiene secuestrado no solo a aquellos 78 valientes, sino además a todo un pueblo que por vía constitucional trabaja  con denuedo por restaurar la democracia, contando para ello con un líder insigne, Leopoldo López, llamado ha constituirse en el primer civil venezolano proclamado Presidente de la República  durante su secuestro en una cárcel militar, pero igual ¡Ni Un Paso Atrás¡ ORA y LABORA.

                          

lunes, 1 de febrero de 2016

El Tigre, domingo 31 de Enero de 2016
Ronny Padrón
Democracia Cristiana Hoy
¿Por qué  retardan la salida?

Es la pregunta que se hacen cada día más venezolanos vista la ineficiencia de la bancada demócrata para cumplir con aquello para lo cual fue electa, considerando que estamos bajo dictadura socialista.

Y esa obligación comprende sólo dos cuestiones de suprema importancia: La libertad de los presos políticos y la salida constitucional de la dictadura, a la brevedad posible. Solo dos, ello por cuanto se entiende  en primer término el riesgo de vida implícito en la prisión política bajo socialismo, horror este que padecen decenas de compatriotas, con mención especial para el caso de Leopoldo López, por ser este el líder político más destacado del movimiento demócrata nacional. 

En cuanto al segundo objetivo pendiente, se comprende que la permanencia de la dictadura socialista en gobierno representa la diaria y efectiva condena de muerte por hambre, enfermedad o a manos del hampa para  cualquier  venezolanos  que haga vida en el territorio patrio. Se trata entonces de un acto de supervivencia colectiva cuando clamamos por la salida constitucional de la dictadura en gobierno. En consecuencia rechazamos la  pretensión de banalizar  la catástrofe  representada por la vigente dictadura socialista, cuando observamos que sigue imponiéndose una agenda legislativa más propia de países democráticos en situación normal.

Ninguno de los cambios anhelados por los venezolanos será posible mientras haya prisioneros políticos y gobierne el socialismo encabezado por el  usurpador Nicolás Maduro Moros ¡Ni Un Paso Atrás¡ ORA y LABORA.