miércoles, 25 de julio de 2012

Ciudad El Tigre, sábado 21 de julio de 2012.
Ronny Padrón.
Democracia Cristiana Hoy.

¿Cuánto vale un acuerdo del CNE socialista?

El título viene a cuento en razón a la diatriba política generada por la reciente firma del acuerdo propuesto por el Consejo Nacional Electoral (CNE), en especial la rúbrica correspondiente a los representantes del candidato de la unidad democrática.
Tal debate tiene lugar por el simple hecho de la nula credibilidad que los demócratas venezolanos otorgamos a un Poder Electoral al servicio de Hugo Chávez.

Cuando es pública, notoria y comunicacional la propensión socialista del Poder Electoral - el rector Vicente Díaz es sólo excepción que confirma la regla- de allí su innecesaria prueba, suscribir un acuerdo que exige de sus firmantes el compromiso de: ¨Actuar en estricto cumplimiento de la Constitución, las leyes, las normativas electorales que rigen el proceso electoral, "Reconocer los resultados emitidos por el Poder Electoral, única autoridad legítima y competente en la elección presidencial del 7 de octubre de 2012, los cuales son la expresión perfecta de la soberanía del pueblo venezolano, ejercido a través del sufragio", por solo mencionar dos de los cuatro puntos allí contemplados, sirve sólo para reiterar esa otra realidad que atormenta al régimen hoy: Su CNE socialista no tiene la autoridad moral para hacer respetar por sí mismo un resultado comicial en la elección presidencial.

Lo anterior es una tragedia comparable al tamaño de los abusos que a partir del 11 de abril de 2002 han cometido todas las autoridades del CNE en razón de complacer los delirios de poder del socialista Hugo Chávez. Llegó la hora en que la vida les pasa factura. Veamos.

Si bien es cierto que desde la ¨Masacre del Silencio¨ en 2002 hasta el presente han sido muchas las reformas implementadas por el socialismo en su Poder Electoral a objeto de brindar el indispensable ropaje democrático al régimen en gobierno, no lo es menos que la necesidad de imponerse en los eventos electorales clave ha hecho inocultable la parcialización del órgano comicial.

Sobremanera evidente el empleo indiscriminado de absolutamente todos los bienes del Estado con fines proselitistas, sin desdeñar el colosal gasto que en campaña electoral desarrolla el teniente coronel de marras cuando alguno de tales eventos resulta de su interés. Si a ello agregamos el inmoral chantaje desde otrora ejecutado contra todo aquel asalariado del Estado socialista, el silencio o la aquiescencia del CNE de Hugo Chávez nos hace comprender el porqué de su actual incapacidad moral.

Cuando un Poder Electoral resulta inepto en la praxis para regular siquiera ¨cadenas¨ y evitar que con ellas se promueva X candidatura directa o indirectamente; si no puede imponer el retiro de propaganda electoral de los edificios públicos y portales web oficiales, y menos aún de impedir la utilización de recursos públicos en la campaña electoral ¿cómo va a pretender respeto por la sola firma de un documento?

Porque resulta que conforme al ordenamiento jurídico nacional el sufragio es un derecho que se ejerce mediante votaciones libres, universales, directas y secretas, sólo así adquiere legitimidad, ello conforme a la Carta Magna en su artículo 63, principio éste casi calcado del artículo 21.3 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, igualmente ley nacional que reza: ¨La voluntad del pueblo es la base de la autoridad del poder público; esta voluntad se expresará mediante elecciones auténticas que habrán de celebrarse periódicamente, por sufragio universal e igual y por voto secreto u otro procedimiento equivalente que garantice la libertad del voto.¨.

Los anteriores conceptos jurídicos tienen absoluta prelación por sobre los resultados electorales que pueda emitir una autoridad comicial con las características del CNE, de allí que el valor jurídico-político del mentado acuerdo tendrá por único fundamento la estricta sujeción del órgano comicial a lo que son sus competencias y deberes legales y constitucionales de acá al 7-O. De no hacerlo, no existirá acuerdo, proclama ni resolución suficientes para anular la cabal aplicación del muy constitucional artículo 350. ORA y LABORA.

caballeropercival@hotmail.com

miércoles, 18 de julio de 2012

Ciudad El Tigre, sábado 14 de julio de 2012
Ronny Padrón.

Democracia Cristiana Hoy.

Socialistas del CNE: sépanlo, ya crecimos.

¨La presidenta del Consejo Nacional Electoral, Tibisay Lucena, informó la aprobación de un acuerdo que pondrán a disposición de las candidatas y los candidatos presidenciales, en el que se comprometan a actuar en estricto cumplimiento de las leyes que rigen el proceso electoral, a reconocer los resultados electorales emitidos por el Poder Electoral y a competir bajo un clima de respeto durante la campaña¨ Fuente: Sala de Prensa CNE. De ésta manera el Consejo Nacional Electoral de Hugo Chávez pretende neutralizar la muy razonable petición de acuerdo político presentado por el Comando Venezuela en el interés de evitar que el candidato presidencial socialista Hugo Chávez continuase abusando para su beneficio electoral, del cargo que ejerce ilegítimamente desde el 11 de abril de 2002.

Qué pretende hacernos creer el CNE de Hugo Chávez cuando se niega a regular las ¨cadenas¨ presidenciales destinadas a promover al candidato socialista. Ello sin mencionar la negativa del Poder Electoral de prohibir el uso de sitios oficiales, físicos o digitales para hacer propaganda comicial, dos de las peticiones más emblemáticas contenidas en el precitado acuerdo, para la consideración del ente comicial y la firma compromiso de todos los aspirantes a la silla presidencial.
Pero éste nuevo insulto a la inteligencia de la Venezuela democrática en modo alguno alcanza para desmoralizarnos, como tampoco lo han logrado las encuestas trucadas del socialismo; es que la realidad es necia y puede más que la mentira oficial. Resulta entonces pertinente ratificar algunos conceptos que parecieran olvidar desde las alturas del socialismo.

Para comenzar, desde el lado demócrata nadie se cree el cuento de que acá existe Estado Democrático y Social de Derecho y de Justicia, en los términos de la Carta Magna. Si en la etapa democrática, previa al ascenso del socialismo, el Estado de Derecho estaba seriamente comprometido y en razón de ello muchos caímos en la estafa electoral de Hugo Chávez, hoy día los vestigios de un régimen democrático de libertades constitucional sólo tienen razón de ser en la necesidad de Hugo Chávez por conservar la fachada democrática, única vía de hacer tolerable al socialismo ante la comunidad internacional de hoy día. De no ser por ello, hace rato los comicios en Venezuela serian émulo de los eventos electorales habituales en la Cuba castrista, de sólo un partido político legalmente aceptado, el partido comunista cubano.

Entonces, las actuales autoridades del Poder Electoral, y todos aquellos que lo han dirigido a partir del 11 de abril de 2002, deben tener muy claro que no pasaran ¨lisos¨ el juicio de la historia, necesario a la reconciliación nacional. Entendemos muy bien que sólo ante la fuerza popular que conforme a la Carta Magna lograremos desplegar el próximo 07 de octubre, ustedes aceptarían un triunfo del Comando Venezuela, no antes.

Igualmente pertinente clarificar lo que estimamos es la percepción del común de los demócratas venezolanos en relación a la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) y sus derivados: Milicia Bolivariana, Guardia Territorial y demás etcéteras. Desde hace mucho comprendimos que ésta es una fuerza militar al servicio exclusivo del socialismo, un hecho público, notorio y comunicacional. Su obligada participación en los comicios, eventos de naturaleza civil, los condena a nuestro eterno repudio, independientemente de que para el sufragio de octubre, alcanzaren a cumplir su deber constitucional permitiendo que la voluntad popular se manifieste libre a través del voto.

Una vez restaurada la constitucionalidad democrática, la FANB socialista debe dar paso a una Fuerza Armada Nacional en los términos de la Carta Magna, al servicio de los venezolanos, no sin antes un juicio justo para cada uno de quienes han integrado a ese, el principal órgano al servicio del régimen de facto hoy en gobierno. Es que sin justicia y verdad no habrá paz.

Establecidas las premisas sólo queda reiterar que 13 años de socialismo son demasiados y bien que vale la pena que todos los venezolanos zanjemos el abismo por la muy pacífica vía electoral. Aclarando sin embargo que no es esa la única vía constitucional que tiene éste pueblo vejado para recuperar su dignidad. ORA y LABORA.

caballeropercival@hotmail.com


miércoles, 11 de julio de 2012

Ciudad El Tigre, sábado 07 de julio de 2012
Ronny Padrón.

Democracia Cristiana Hoy.

Abajo la careta democrática del socialismo.

Se ha dicho hasta la saciedad pero no está demás reiterarlo: la fachada democrática constituye la única barrera que ha impedido al régimen socialista de Hugo Chávez exterminar completamente al Estado Social de Derecho y de Justicia consagrado en la Carta Magna venezolana, y la actual campaña presidencial así lo señala.

A la hora de escribir éstas líneas es noticia de primera plana la prohibición de facto que para marchar por la Parroquia la Vega, en Caracas, impuso la Policía Nacional Bolivariana al candidato demócrata unitario, fundamentándose para ello en ¨órdenes superiores¨ como es típico a una tiranía. Más allá del evidente temor por parte del régimen socialista ante el avance popular de la candidatura presidencial unitaria, lo anterior denota algo especialmente grave: el régimen comienza a abandonar las formas en medio de una campaña electoral.

Decimos grave por cuanto esa formalidad constituía garantía de sobrevivencia para los vestigios del Estado de Derecho en Venezuela, pero el abandono de aquella sólo augura la intención gubernamental de iniciar nueva etapa política: La tiranía formal. Éste tipo de gobiernos, nada extraños si hablamos de socialismo, a saber: el régimen de los hermanos Castro en la Cuba de hoy, supondría un muy distinto escenario pasados 13 años de mascarada demócrata.

Es el caso, que transitar hacia un régimen tiránico formal en las actuales circunstancias implica necesariamente el desconocimiento del resultado electoral previsto para el venidero 7 de octubre. Es así como se torna en razón existencial para la República, el clamar ante el mundo y cada día con mayor fuerza, acerca de lo que acá se va perfilando. Lo de hoy en la Vega puede ser el comienzo de una escalada de violencia institucional inédita, que haría nugatoria la campaña presidencial demócrata, ello en preparación de un evento electoral irregular, castrador del voto popular o bien de su legítimo resultado.

Como en tantas otras oportunidades, el socialismo acá gobernante sólo avanzará en la medida que no hallare fuerza política en disposición y capacidad de detenerle, pero siendo la fachada democrática el activo político que le ha granjeado tolerancia continental y mundial, al igual que a sus pares de Bolivia, Nicaragua, Ecuador y Argentina, es plausible mostrarle desde ya el costo de llegar a perderla. Más sombrío nuestro futuro si guardáramos cobarde silencio ante los presentes desafueros, dando a entender entonces que frente al 7-O podríamos ¨llegar a bailar al son que el socialismo nos toque¨. ORA y LABORA.

caballeropercival@hotmail.com