jueves, 1 de agosto de 2013

El Tigre, sábado 27 de julio de 2013
Ronny Padrón
Democracia Cristiana Hoy
Municipales del 8D: ¨peor es nada¨
La intención no es consolar a nadie, se trata sólo de describir una situación política que estimo subsiste al tiempo presente, siempre en la búsqueda de soluciones al caos reinante.

Así entonces decimos que, el evento comicial pautado para el venidero 8 de diciembre, de cierto constituye una oportunidad en el proceso de restauración constitucional, en la medida que toda elección bajo tiranías brinda ocasión para que una dirigencia demócrata bien definida en su rol intente generar cuando menos la crisis política indispensable a la defenestración del régimen gobernante, ello considerando la crispación popular inherente a tales eventos, verbigracia las pasadas presidenciales del 14-A.

En esa oportunidad, como pocas durante 14 años de tiranía socialista, la dirigencia demócrata organizada tuvo a disposición un nivel de ¨masa crítica¨ suficiente como para generar la crisis política capaz incluso de concretar la restauración constitucional por vía de rebelión popular conforme al 350 constitucional, todo ello con fundamento en la negativa aún vigente por parte del régimen, de auditar integralmente el proceso comicial de entonces.

Igualmente válido el ejemplo, para evidenciar nuestra necesidad como demócratas de contar con un nuevo liderazgo al frente del movimiento opositor organizado, a modo que este 8 de diciembre deje de ser el ¨peor es nada¨ que vislumbramos al día de hoy.

 Esto lo decimos en el entendido de que muy a pesar del intrínseco debilitamiento del régimen encabezado por el usurpador Nicolás Maduro Moros, el colaboracionismo criollo al frente del movimiento demócrata organizado ha logrado desmoralizar en mucho a gruesos sectores de la sociedad venezolana, embargados hoy con la sensación de impotencia cívica, ante el indetenible avance del caos socialista, como consecuencia de observar que el único referente político organizado, alternativa lógica a la tiranía en gobierno, clama porque aceptemos las reglas de juego vigentes, desdeñando completamente la protesta política, pública, pacífica y no armada, que consagrada en la Constitución resulta indispensable para su cabal restauración.

Decimos entonces que tales comicios son ¨un peor es nada¨, ya que ciertamente a la fecha presente los venezolanos continuamos siendo incapaces de coordinar una propuesta política que en lo táctico y estratégico supere a la infausta tesis electoralista del colaboracionismo criollo, una prueba más de nuestra grave crisis como sociedad.

¨Un peor es nada¨, porque cualquier venezolano en intención de honestidad comprende que a la fecha presente resulta imposible que algún candidato demócrata para los prenombrados comicios logre obtener los recursos económicos necesarios a una campaña electoral, suficientes  para vencer al más mediocre de los socialistas, sin que tal financiamiento llegue a contar con la venia del régimen a nivel central. Esto sin mencionar el ventajismo electoral de todo socialismo en gobierno, incluyendo a un órgano comicial obediente al PSUV.

Cómo imaginar entonces un 8D distinto a ¨un peor es nada¨ mientras mantengamos al colaboracionismo criollo al frente del movimiento demócrata organizado, si ello implica que nuestros alcaldes y concejales demócratas, próximos a elegir, en lugar de abocarse a la restauración constitucional, indispensable a la libertad y la dignidad nacional, permanecerán concentrados en obtener a tiempo el situado constitucional y otras transferencias o subvenciones nacionales, siempre ordenadas por Miraflores, como ha ocurrido normalmente durante los últimos 14 años. Que nadie se sorprenda entonces, porque eso es lo que hay ¡ABAJO EL SOCIALISMO¡ ORA y LABORA.