viernes, 26 de diciembre de 2008

Informe de fin de año.

Luego de todo un año de análisis respecto a la pertinencia del presente blog, en medio de las especiales circunstancias de nuestra Pequeña Venecia, resolvimos iniciar labor pública para el mes de enero del año 2.009.



Demasiada tardanza, quizá. Más ante ello solo nos resta decir que las decisiones importantes llevan su tiempo madurar, y para los responsables del presente proyecto, este lo tiene en gran dimensión.



Porque plantearnos la restauración de la Constitucionalidad Democrática en la República de Venezuela como meta inicial, para luego dar paso al trabajo por la reforma del Estado, con fundamento en la ética cristiana, no es labor de un dia, ni resolución para fin de semana.



Acertar donde falló la partidocracia de otrora, y triunfar donde se agota hoy el régimen Chávez-FARC, requiere de un esfuerzo superior al empleado por aquellos que antecedieron, en proporciones que nos resulta imposible hoy calcular.



Pero ¿Lo vale?, por supuesto que lo vale. Una y mil veces, la libertad y el progreso de la República de Venezuela, lo vale. ORA Y LABORA.

Ronny Leonardo Padrón Pérez.

¨POR LA REPÚBLICA DE VENEZUELA, CON EL ESPÍRITU DEL 11 DE ABRIL¨.



Virtud demócrata versus la esclavitud socialista.

Ciudad El Tigre, sábado 29 de noviembre de 2008
Ronny Padrón.
DEMOCRACIA CRISTIANA HOY.

Virtud demócrata versus la esclavitud socialista.

Es el planteamiento que los demócratas deberíamos profundizar ante los resultados del 23N. Consolidado el voto como instrumento de cambio político, es menester ampliar tal brecha en el régimen Chávez-FARC. Esta no es más que una documentada debilidad por sostener su fachada democrática, donde los eventos comiciales ocupan lugar primordial.

Más allá de las normales disquisiciones respecto a la cantidad de votos obtenidos por la alternativa democrática, el hecho cierto de la aceptación de emblemáticas victorias por parte del teniente coronel Chávez, no deja lugar a dudas sobre la magnitud de nuestra fuerza. Seguro estoy, que tal poderío se alcanzó precisamente gracias el contraste positivo que pudo brindarse ante el esclavismo promovido por el llamado Socialismo del siglo XXI.

Vislumbro entonces, un indetenible crecimiento demócrata tanto en lo político como en lo electoral, en la medida que sepamos brindar al ciudadano de a pie, demostración indubitable sobre la conveniencia de un régimen democrático de libertades, en lugar de lo que hoy padecemos.

Conjuntamente con la promesa de inclusión social, manifestada por el conjunto de gobernadores demócratas recién electos, emblema de su inminente gestión, otro tanto debería serlo, la optimización de la gestión pública mediante la prestación por particulares de servicios públicos que el Estado regional y local esté obligado solo a garantizar.

Aún dentro del reducido espacio de maniobra que el régimen Chávez-FARC permita a los alcaldes y gobernadores demócratas, son muchos los cambios que en tal sentido podrían implementarse con resultados de seguro halagüeños.

Bastaría con revisar el estado de funcionamiento de los hospitales, de común competencia de las gobernaciones, comparado con la prestación del servicio de salud por la empresa privada, para concluir sobre la mayor eficiencia por parte de esta última. La gerencia privada de servicios públicos, como vía para el logro de una mayor transparencia y eficiencia, es un camino ya abordado en otras latitudes, que nuestras autoridades demócratas deberían ensayar ha modo de profundizar el contraste con la perpetua corrupción e ineficiencia socialistas.

Porque al fin y al cabo, tenemos por norte la idea de concentrar al Estado tanto a nivel municipal y estadal, en la ejecución de lo que son sus funciones propias, cesando su hipertrofia, vicio generador de gobernantes que en lugar de mandatarios del pueblo que los elige, se consideran sus dueños, con base en el control indebido que mantienen sobre el patrimonio público.

En tal sentido, creo es menester, que en medio de las transformaciones políticas ha motorizar por parte de la alternativa demócrata, se destaque la necesidad de un mayor control sobre el uso del patrimonio público en campañas electorales. Tanto la Ley de partidos políticos, reuniones públicas y manifestaciones, como la muy publicitada Ley contra la corrupción, de reciente data, prohíben de manera categórica, la utilización de recursos públicos en beneficio de parcialidad política alguna.

Es el caso, que visto el colosal dispendio propagandístico por parte del partido político Chávez-FARC en la recién finalizada campaña, es obligante para la dirigencia demócrata exigir la investigación sobre tal financiamiento, hasta sancionar si tal fuere el caso. Un silencio en tal sentido seria estímulo para la continuidad de tal perversión electoral, en perjuicio de la evolución política de nuestro país. ORA Y LABORA.
caballeropercival@cantv.net

sábado, 22 de noviembre de 2008

Los anti-valores como el problema político

Ciudad El Tigre, domingo 02 de noviembre de 2008

Ronny Padrón.


DEMOCRACIA CRISTIANA HOY.


Los anti-valores como el problema político.



Cuando en Venezuela muchos entienden la política como actividad para pérfidos, creo son más los que aprenden una gran lección. Si bien es cierto, que en nuestro país la política de común no ha sido el dominio para los más honorables, también lo es, una relación directamente proporcional entre tal mácula y el grado reprobable de nuestros gobiernos.


En pocas palabras, a mayor corrupción entre la dirigencia política, peor ha sido la gestión gubernativa. Sobre tal regla, desconozco excepción. Reincido en esta temática, habida cuenta su utilidad cuando se intenta comprender cada etapa del régimen Chávez-Farc.


A la fecha presente, son los comicios regionales y locales el hito de obligada reflexión, y tal como señala el dogma antedicho, la descomposición ética de nuestra dirigencia demócrata, opera como única contención ante el anhelo de cambio en la mayoría popular.


No es casualidad, la dificultad en consolidar victorias demócratas, en aquellas regiones y localidades donde nuestra dirigencia adolece de las credenciales éticas necesarias para capitalizar aquel anhelo de justicia y libertad. En tal sentido, se conoce, que de común los electores tienden a movilizarse más a favor de algo o de alguien, que en su contra.


Si ante tal circunstancia, agregamos la consigna electoral de evitar la confrontación ideológica con el régimen Chávez-Farc, concentrando el debate en la sola problemática local y regional, se entenderán, las dificultades precitadas.


Porque los anti-valores son siempre la peor elección. Cuando el 2D pasado, la mayoría electoral rechazó la propuesta de reforma Chávez-Farc, las fuerzas militares, hasta entonces incondicionales a su comandante-presidente, atendieron al llamado del ¨deber ser¨, e hicieron respetar la soberanía popular. El venidero 23 de noviembre, ocurrirá otro tanto.


Solo en aquellas regiones y localidades, donde las fuerzas democráticas contemos con un liderazgo honrado y valiente, merecedor del respeto y confianza popular, será posible el triunfo electoral, independientemente cual fuere a la fecha la intención de voto.


Lo indica el Catecismo de la Iglesia Católica entre los Deberes de las autoridades civiles, a través de su número 2235 ¨Los que ejercen una autoridad deben ejercerla como un servicio. ‘El que quiera llegar a ser grande entre vosotros, será vuestro esclavo’ (Mt 20, 26) ¨.
Internalizar como sociedad, la necesidad de promover a una dirigencia política destacada por su ética, como vía para alcanzar el desarrollo y la prosperidad nacional, nos llevará años, como años tomó el descender al presente abismo. Hoy, es buen día para iniciar un ascenso. ORA Y LABORA.
caballeropercival@cantv.net

sábado, 22 de marzo de 2008

PRINCIPIOS RECTORES.

Ciudad El Tigre, martes 22 de enero de 2008



PRINCIPIOS RECTORES DEL PROYECTO POLÍTICO

¨TRABAJO, LEY Y ORDEN¨.


PREÁMBULO.




El proyecto político ¨TRABAJO, LEY Y ORDEN¨, surge de la necesidad sentida en Venezuela por establecer una alternativa de poder político auténticamente democrático, distinto al actual régimen gobernante, representativo del totalitarismo autocrático, y diferente al régimen político anterior, representativo del totalitarismo partidocrático.

Los fundadores del presente proyecto, identificados plenamente con los valores políticos de la DEMOCRACIA CRISTIANA como la doctrina que entendemos adecuada para hacer frente al presente y futuro político de nuestro país, nos establecimos como meta, el darle plena aplicabilidad a esos principios que distinguen a nuestra doctrina, buscando evidenciar en la praxis, la pertinencia de su realización fáctica.
Entendemos, como principal causa por la cual ello aún no ha sido posible en el marco de la organización partidista, la falta de compromiso con esos valores enunciados, y en tal sentido nos hemos fijado como gran meta la total fidelidad por los valores y principios que hoy proclamamos en la certeza que son esos y no otros los que conducirán a la plena libertad de nuestra Nación.



PRINCIPIOS RECTORES.

Los principios rectores que a continuación expondremos, no persiguen nada más allá de constituirse en parámetros realistas de objetiva aplicación, con base en la DEMOCRACIA CRISTIANA como ideología política de este proyecto.

PRIMERO. Toda acción política entendiendo por tal a aquella actividad dirigida al logro del poder político, ejecutada en el marco del proyecto ¨TRABAJO, LEY Y ORDEN¨, (en adelante se le entenderá como EL PROYECTO) por cualquiera de quienes se consideren pertenecientes al mismo, deberá ajustarse de manera incontrovertible, a los parámetros éticos que iluminan a la DEMOCRACIA CRISTIANA como ideología política, los cuales se encuentran claramente definidos en el CATECISMO DE LA IGLESIA CATÓLICA-APOSTÓLICA-ROMANA.



SEGUNDO. La constante y perpetua búsqueda de la verdad, se entenderá como el principal de los parámetros éticos de nuestra actividad política, entendiendo, que su adecuación y pertinencia está sometida igualmente a especiales reglas que expresadas taxativamente en el CATECISMO DE LA IGLESIA CATÓLICA-APOSTÓLICA-ROMANA, deberán ser conocidas y aceptadas por todos los miembros del PROYECTO.



TERCERO. El PROYECTO, en su desarrollo y funcionamiento debe constituirse en ejemplo vivo sobre la pertinencia de los valores que proclama, por ende la igualdad de oportunidades, la justicia, la libertad, la responsabilidad y el trabajo entre otros valores distintivos de la DEMOCRACIA CRISTIANA, deben constituirse nuestra común práctica. En tal sentido proclamamos como única condición necesaria para integrar el presente PROYECTO, la aceptación plena de los valores y principios que definen a la DEMOCRACIA CRISTIANA como ideología política.

CUARTO. El PROYECTO, tiene como fin único el BIEN COMÚN de la Nación venezolana. Por ende, toda acción política dentro del proyecto que no conlleve al logro de tal objetivo se considera contraria a nuestra razón de ser y de tal manera confrontada. En la búsqueda del BIEN COMÚN, nos fijamos como meta, la transferencia en la persona de cada ciudadano venezolano, de toda la capacidad política, económica, social y cultural a la que tiene derecho como ser humano poniendo como único límite sus personales condiciones y el derecho de los demás. Ello en el entendido que constituye esta la manera natural de alcanzar una sociedad digna y próspera basada en ciudadanos educados y laboriosos.



QUINTO. La acción política del PROYECTO, para el logro de su fin único, siempre deberá someterse a la legitimidad de los medios empleados para ello. En tal sentido la base para calificar la legitimidad de la acción en el caso concreto, la constituye el CATECISMO DE LA IGLESIA CATÓLICA-APOSTÓLICA-ROMANA, y los métodos de verificación contemplados en el mismo.

jueves, 3 de enero de 2008

Presentación.

Bienvenidos al blog ¨Trabajo, Ley y Orden¨. Ha sido constituido con el objetivo de posicionarse como un órgano divulgativo del proyecto político de orientación democrata-cristiana, integrado por los ciudadanos venezolanos Juan Rossi y Ronny Padron.



Proximamente iniciaremos labor en pleno. Gracias por la atención prestada. ORA Y LABORA.



El redactor.