viernes, 28 de agosto de 2009

¿Quién juzgará al teniente coronel socialista?.

Ciudad El Tigre, Estado Anzoátegui
Ronny Padrón
DEMOCRACIA CRISTIANA HOY.

¿Quién juzgará al teniente coronel socialista ?

Porque si de algo estamos seguros los demócratas venezolanos, más ahora cuando el socialismo gobernante ataca el derecho constitucional a la educación, ya no es solo respecto a nuestra necesidad de reemplazar al comandante socialista en gobierno, sino es también la obligación sociológica de hacerle pagar por los ilícitos cometidos durante sus más de 10 años en el poder.

Vienen entonces las preguntas: ¿Quién lo juzgaría? ¿En que condiciones? y varios etcéteras. Le otorgo interés al asunto en la medida que estimaría insuficiente y sumamente injusto la simple defenestración del precitado militar. Pero no basta con sostener tan lógica postura; es menester también el viabilizar su concreción.

Este dilema, entendemos ya se planteó con motivo de la masacre del 11 de abril de 2.002. En aquel entonces la Fuerza Armada Nacional, en cumplimiento de sus deberes constitucionales mantuvo en custodia al teniente coronel socialista una vez que este hubo renunciado a la presidencia de la República, y entregándoseles voluntariamente reconoció su responsabilidad política por tan sangrientos hechos.

En tal oportunidad, es conocida la disyuntiva que surgió en el seno del para entonces gobierno de transición en relación al destino que debía brindársele al personaje de marras, habida cuenta el valor político de tal decisión. En tanto el militar renunciante planteaba su deseo de viajar a la República de Cuba, junto a una considerable cantidad de dinero en moneda estadounidense, un respetable sector dentro de la transición estimaba importante someter al comandante socialista al juzgamiento en territorio patrio, de conformidad con nuestra legislación.

Es un hecho, que desde el punto de vista político, la opción de posibilitar la salida territorial de tiranos ha modo de evitar traumas sociales de consideración, nunca será deleznable, tal como lo muestra el caso de la hermana República de Honduras, que salió bien librada del terrorismo socialista en progreso, expulsando al ex–presidente José Manuel Zelaya Rosales de su territorio nacional una vez este hubo transgredido flagrantemente su Carta Magna, expulsión esta, que si bien no es pautada en la legislación hondureña, vino a ser una medida de legítima defensa nacional¨, que evitó al pueblo hondureño las conocidas represalias del terrorismo socialista defenestrado.

En el caso venezolano, el problema tiene plena vigencia, habida cuenta lo apremiante de la defenestración de nuestro actual gobernante de facto, considerada como fuere su irreversible disposición a la transgresión y al caos. Analizando, que en el caso hondureño muy a pesar de la plena vigencia de un Estado democrático de derecho, sus personeros legítimos optaron por evitar el terrorismo socialista frente al juzgamiento de un ex–presidente de tan pérfida ideología, ¿Cual seria el panorama en la Venezuela actual, donde no existe Estado de Derecho, pues el socialismo gobernante lo destruyó?

Si el juzgamiento en territorio patrio fuere la decisión, más allá de un necesario estado de excepción, en prevención del terrorismo socialista, resultará entonces necesario el conformar un poder judicial transitorio en capacidad ética y profesional incontrovertible, suficiente como para designar un tribunal calificado a tal encomienda jurisdiccional, capaz de brindar todas las garantías procesales al teniente coronel socialista. Solo así, un juicio de tal índole tendría su razón de ser. De lo contrario, aquel viaje para Cuba no perdería validez, en tanto la jurisdicción internacional llegare a cumplir su obligada misión de justicia. ORA Y LABORA.
caballeropercival@cantv.net
http://trabajoleyyorden.blogspot.com/

martes, 25 de agosto de 2009

La ¨guerra¨ entre Venezuela y Colombia.

La ¨guerra¨ entre Venezuela y Colombia.

Por Orlando Ochoa Terán. Fuente: Diario de América

El vicecanciller venezolano, Arias Cárdenas, anunció recientemente que Venezuela obligaría a Colombia a desistir de bases militares con personal militar de EE UU. Para esta acción convocó a “todos los venezolanos”. ¿Está en condiciones la Venezuela bolivariana para confrontar militarmente a Colombia y lograr el respaldo de “todos los venezolanos”? Plantearse la posibilidad de que un país dividido en lo más profundo de su tejido social pueda participar en un conflicto con un adversario superior en número, en experiencia de combate y respaldado por la más poderosa corporación militar del planeta, no sólo es una idea absurda, sino una gran estupidez.

Pero, como decía Frederick Schiller, contra la estupidez los propios dioses luchan en vano. Nada de esto es extraño en la historia de los conflictos y especialmente de las derrotas. Pese a que los hombres y mujeres del gobierno bolivariano no son precisamente los venezolanos más competentes, no es la ignorancia lo que generalmente conduce a esta decisión, como bien lo apunta la historiadora Bárbara Tuchman, sino que siempre habrá alguien en política que persista en la búsqueda de un objetivo a pesar de que un cúmulo de evidencias le demuestre que es racionalmente inalcanzable.

Robert McNamara, considerado como “el más brillante entre los brillantes de su generación”, personificó la absurda decisión de involucrar a EE UU en la guerra de Vietnam en momentos en que toda la inteligencia disponible indicaba que sufriría la más humillante derrota de su historia. Un modelo de error de juicio, arrogancia y embriaguez de poder en hombres brillantes. ¿Qué se puede esperar de la revolución bolivariana? En diez años de revolución el presidente Chávez se ha empeñado en declarar a la mitad de los venezolanos como apátridas por el solo hecho de disentir.

El pasado martes exhortó también a los sectores de oposición a “unirse contra la amenaza imperial” ¿Cómo persuadir a esos millones de venezolanos que han sido estigmatizados como traidores a la patria a que luchen en contra de una nación que ostenta muchos de los derechos constitucionales y valores democráticos que les niegan en su propio país? Premisas estratégicasAparte de esta enorme desventaja venezolana en las premisas morales de un conflicto, están también las estratégicas y de apresto operacional. Es un axioma en doctrina militar que la experiencia en combate no es sustituible por el mejor de los entrenamientos. El ejército colombiano, después del de EE UU, es el más experimentado del continente y uno de los primeros en el mundo.

No debería ser muy complicado para la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas Colombianas, con el apoyo de una reserva de veteranos formados en casi medio siglo de conflicto, enfrentar a oficiales de la FAN bolivariana, entrenados en compra/venta de verduras y carnes en Mercal y en Pdval o en transacciones financieras en los sectores de la economía, finanzas, comercio y petróleo, así como en las negociaciones para adquirir en el exterior armas que no saben usar.

A los que crean que la ferretería bélica adquirida a Rusia podría hacer la diferencia, hay malas noticias. Un gran número de los pilotos entrenados para volar los Sukhoi han emigrado del componente aéreo a líneas aéreas nacionales e internacionales, por razones de compensación. En seguimiento de esa concepción bolivariana que los lleva a comprar pollos, carne, caraotas o arroz en el exterior cuando escasean en Venezuela, ya en el Alto Mando se habla de “comprar” pilotos rusos en retiro.

Por otra parte, sometidos los Sukhoi a condiciones climáticas para las cuales no fueron fabricados ya muestran los efectos corrosivos del salitre de Barcelona y de las inclemencias del clima tropical en El Sombrero. Algunos manuales operativos no han llegado y los disponibles no han sido traducidos correctamente.

Tampoco es un secreto que la columna vertebral de la corporación militar venezolana está aquejada de los males naturales del tiempo y de la idiocia conceptual bolivariana del mantenimiento. El transporte aéreo Hércules, los Mirage, los F-16, las fragatas, los submarinos y los tanques AMX-30 se encuentran en un estado desolador. Que el almirante Iván Carratú Molina, ex director del Instituto de Altos Estudios de la Defensa Nacional, declare al ABC de España que “Colombia ganaría en caso de una guerra con Venezuela” no es un misterio ni siquiera para el oligofrénico de Arias Cárdenas.

Pero ya sabemos que presumir de lo que se carece es una característica del fenotipo bolivariano. El problema es que con frecuencia los que alardean se creen sus propias mentiras y nos pudieran embarcar en una locura.

1688 y 1776.

Hugo J. Faría // 1688 y 1776

Llegó la hora de superar nuestros complejos y promover no sólo la democracia sino sus bases
A comienzos del siglo XIII regresa a Inglaterra Juan sin Tierra derrotado de Francia, convoca a los nobles, les pide recursos y éstos acceden si el rey firma la Carta Magna que consagra la protección de una serie de derechos naturales.

El rey ante la necesidad presupuestaria se vio obligado a firmarla en 1215. Esta firma detona una batalla entre el parlamento y la corona por el control de Inglaterra que duraría unos 600 años, donde el hilo conductor es la continua necesidad de recursos de la corona y su dependencia económica, inicialmente de los nobles y posteriormente también de propietarios y comerciantes.

Otro factor que influyó en el proceso fue el sistema judicial inglés basado en la costumbre y caracterizado por la jurisprudencia y jurados, elegidos de entre las propias comunidades al igual que los jueces. Ante la existencia de un rey poderoso y en una Inglaterra relativamente pacífica, los jueces se aliaron con los propietarios y ello contribuyó a un fuerte desarrollo del derecho de propiedad privada.

Elizabeth fue la última reina de la dinastía Tudor. Los Tudor fueron reemplazados por los Estuardo, quienes fueron vistos por el parlamento con mucha suspicacia por sus tendencias absolutistas. Carlos I trata de restablecer las prerrogativas feudales y vender derechos de monopolio. El parlamento se opone, se desata una guerra civil y Carlos I muere decapitado en 1649 y lo suceden Carlos II y Jacobo II, quien en el 1688 pierde el trono principalmente por razones religiosas.

El parlamento identificó su catolicismo con absolutismo y decidieron traer a Guillermo de Orange y María, ambos protestantes, quienes aceptaron que su mandato como reyes no es de origen Divino sino que procede del parlamento, la ley es el rey (Lex, Rex). De modo que inicialmente el parlamento era el siervo de la corona, después su igual y finalmente su amo. Imperio de la ley La Revolución Gloriosa de 1688 es un evento de inmensa significación para la humanidad porque con ella el rey se somete al imperio de la ley, fundamento de toda democracia.

Si somos iguales ante los ojos de la ley, esto tiene implicaciones económicas de grandes proporciones porque promueve el intercambio y los contratos entre desiguales desde el punto de vista económico. Si le sumamos la protección de la propiedad privada garantizada por las cortes inglesas no es de extrañar el surgimiento del capitalismo.

El gran regalo de Inglaterra al mundo es el Estado de Derecho, la democracia parlamentaria, y la intensificación del capitalismo representado en la Revolución Industrial cuyo elemento distintivo es la reducción de las tasas de fertilidad al poco tiempo de su aparición, contribuyendo a la elevación del ingreso por habitante y a la superación de ingresos de subsistencia.

La Revolución Gloriosa sirvió para gestar la Revolución Americana de 1776 que nos legó dos grandes documentos: la Declaración de la Independencia y la Constitución Americana, nutridos por la intelectualidad y experiencia inglesa, y escrita por un grupo de cristianos protestantes como fueron Jefferson, Madison, Adams y Hamilton.

Estos dos documentos han sido la piedra angular de la democracia y economía más exitosa en la historia de la humanidad, permitiendo la corrección de incongruencias iniciales. Países latinos En los países latinos estudiamos y admiramos más los acontecimientos del 14 de Julio de 1789, a pesar que de la Revolución Francesa no surgió la democracia ni la revolución industrial. La corrupción de los jueces, nombrados por el rey, era de tal magnitud que Robespierre afirmaba que la palabra jurisprudencia debe ser borrada de la lengua.

La ausencia de jurisprudencia en los países de origen legal civil francés les ha restado adaptabilidad con serias consecuencias económicas. Creo que los países latinos, en su mayoría católicos, deben redescubrir sus raíces que han sido mejor aprovechadas por los hermanos protestantes. Por ejemplo, el juramento de lealtad de los aragoneses al rey en el siglo XIV rezaba: "Nosotros que somos tan buenos como Usted, le juramos a Usted, que no es mejor que nosotros, aceptarlo como nuestro rey y señor soberano, siempre y cuando Usted respete todas nuestras libertades y leyes; pero si no lo hace, no lo aceptaremos".

La mayoría de los economistas suelen considerar a Adam Smith como el padre de la economía. Sin embargo, los maestros de la Escuela de Salamanca, un grupo de sacerdotes Dominicos, Franciscanos y Jesuitas se adelantaron más de 200 años a Smith, quien es un salmantino algo trasnochado.

Las ideas de John Locke, que tanto influyeron en la lucha contra los Estuardo sobre la división del poder y el origen del Estado, fueron anticipadas por los maestros salmantinos quienes construyeron su filosofía moral sobre la base metafísica y teológica de Santo Tomás de Aquino. Los eventos de 1688 y de 1776 son logros de la civilización judeo cristiana. Ha llegado la hora de superar nuestros complejos y promover no sólo la democracia sino sus bases, el Estado de Derecho y el capitalismo. hjf1750@gmail.com

viernes, 21 de agosto de 2009

Por referendo o concentración, hagamos legítima rebelión.

Ciudad El Tigre, Estado Anzoátegui.
Ronny Padrón.
DEMOCRACIA CRISTIANA HOY.

Por referendo o concentración, hagamos legítima rebelión.

Como adelantamos en reciente escrito, la no aplicación de la ley socialista de educación, dependerá, más allá de las formas (referendo abrogatorio, manifestaciones populares, etc.), del liderazgo demócrata para materializar la restauración constitucional, en base al 350.

No podrá ser de otra manera, luego del 11 de abril. Precisamente hoy, cuando escribo estas líneas, se cumple un quinquenio de aquel RR. De triste recordación no precisamente por su celebración sino por su fallida concreción. ¿Quien en su sano juicio dudaría un instante sobre tan evidente defraudación? sin embargo, a la fecha no existe reclamación.

Es un pequeño ejemplo, en este caso electoral, respecto a la futilidad del procedimiento cuando no se tiene concreción. Nunca como en tal oportunidad las fuerzas demócratas pudieron vigilar y certificar un proceso comicial, sin embargo, a falta de coraje por parte de nuestra dirigencia demócrata, pudo más la estafa y el abuso del régimen socialista. Igual que el 11 de abril, igual que en las parlamentarias de 2.005, tal como en las presidenciales de 2.006, y así un largo etcétera.

Que ahora será distinto. Como saberlo. Ha decir verdad, la dirigencia demócrata actual es esencialmente la misma de aquellos precitados eventos, y la gravedad de la tratativa no les garantiza mejor performance.

¿Entonces? ¿Cuánto queda por hacer? Debo responder que mucho y bastante, pues, si las anteriores afirmaciones son realidades, también lo constituye, el que las sociedades así como generan sus problemas, también sus propias soluciones y tal como Venezuela cultivo por décadas nuestro problema llamado socialismo, igualmente en 10 años va generando una pertinente reacción.

Me explico: el solo hecho de mi inicial afirmación señala a las claras que esta década no fue vana. Voy más allá, no por llamarse dirigentes los que hoy se hallen al frente, serán mañana los responsables de una legítima rebelión. Demasiado lo perdido a lo largo de 10 años, como para fiar la constitucional restauración en aquellos que la obstaculizan hoy por acción u omisión.

En fin, quienes llaman ahora a la calle o a la recolección de firmas en debida organización, no toquen después retirada o llamen a desistir legítimos reclamos ante nueva defraudación. Porque ahora lo sabemos y antes lamentablemente no, que ni la ONU ni OEA ante un conflicto en cuestión, se darán por aludidas salvo riesgo por petróleo o su millonaria distribución.

Es decir, tanta será la opción del régimen socialista en gobierno por mantener el poder, ante la coyuntura presente, como para los demócratas el restaurar la constitución; dependerá todo, de la medida en que hayamos aprendido nosotros la lección. ORA Y LABORA.
caballeropecival@cantv.net
http://trabajoleyyorden.blogspot.com

jueves, 13 de agosto de 2009

Ante el socialismo, el mejor ataque es la buena defensa.

Ciudad El Tigre, Estado Anzoátegui.

Ronny Padrón.
DEMOCRACIA CRISTIANA HOY.

Ante al socialismo, el mejor ataque es la buena defensa.

Lo digo en relación a las muy recientes tratativas del socialismo gobernante. Unas exitosas, otras fracasadas, dignas de revisión en pro de un aprendizaje eficiente. La primera a referir es la relativa al cierre ejecutivo de emisoras radiales independientes; 34 a la fecha presente, entre un total de 240.

Constituye un caso emblemático de negligencia demócrata ante el abuso socialista. Estos procesos administrativos, más allá del ropaje legalista aportado por el régimen totalitarios presente, se caracterizaron por la intención política de neutralizar medios de comunicación social independientes que a la fecha evidenciaban el caos generado por el socialismo en gobierno. Y por aquello de que el conocimiento es poder, era menester cerrarlos.

Lo anterior podemos certificarlo, vistas como fueren las fundamentaciones jurídicas de cada uno de los hasta ahora 34 cierres. Una de las constantes fue, tal como revelan los concesionarios víctimas del atropello, la negativa de la administración socialista en este caso CONATEL, a tramitar la documentación que permitiere validar las habilitaciones administrativas de cada una de esas emisoras.

Un recurso jurídico tan burdo solo podía concluir en ¨éxito¨ gracias a la negligencia evidente de los propietarios de tales medios. Debido a razones solo conocidas por ellos, que hoy afectan a los miles de usuarios de tan importante servicio público, cruzados de brazos consintieron durante largo tiempo el silencio administrativo del régimen socialista, pasividad que luego del cierre de RCTV, no es posible justificar.

Tan cierto el reclamo, que cuando en simultáneo el régimen socialista pretendió aprobar una propuesta de ley sobre delitos mediáticos dirigida igualmente a neutralizar el precitado derecho a la información, visto el colosal rechazo nacional, el socialismo regente una vez más tuvo que recular.

Son dos ejemplos recientes, que corroboran una tesis harto conocida: El socialismo acá regente, solo avanza en la medida que los demócratas lo permiten. Tal axioma adquiere gran pertinencia ante la pretensión socialista referida a la educación. El ahora publicitado proyecto de ley orgánica de educación, por el simple hecho del manejo irregular en su discusión, más allá de la ilegitimidad de origen en cabeza de los actuales parlamentarios, configura razón suficiente para poner en guarda a toda la sociedad venezolana.
Razones de sobra para temer que el régimen socialista en gobierno intentará mediante el preseñalado proyecto, aprobar una ley violatoria de la normativa constitucional que en materia educativa consagra el artículo 102 y siguientes.

De tal manera que resulta imperativo desde ya el concentrar toda la fuerza social para de conformidad con el texto constitucional, trabajar con denuedo hasta el logro de una ley orgánica de educación de conformidad estricta con la Carta Magna, en el convencimiento de que sin el apoyo de la sociedad ni ese ni ningún otro proyecto llegará a ser sancionado. ORA Y LABORA.
caballeropercival@cantv.net

sábado, 8 de agosto de 2009

La revolución se metió en un callejón sin salida con las estatizaciones.

"La revolución se metió en un callejón sin salida con las estatizaciones" El NacionalJueves, 30 de julio de 2009

Entrevista » Gerver Torres (Profesión: Economista Lugar de nacimiento: Maracaibo Cargo: Director de la organización Liderezgo y Visión)


El experto asevera que la corrupción y el control político ­antes que el fanatismo ideológico­ son las razones que motivan al Gobierno a intensificar la política de estatización de empresas. "El Gobierno está creando una chivera de empresas públicas", asevera

Podría decirse que Gerver Torres fue el padre de las privatizaciones en Venezuela. Desde su posición como presidente del Fondo de Inversiones de Venezuela ­con rango de ministro que le dio el ex presidente Carlos Andrés Pérez­ apenas arrancó 1989 se emprendió un proceso de venta de empresas públicas. Ya fuera del Gobierno, en 1994 hizo un balance de lo ocurrido y lo presentó en el libro ¿Quiénes ganan? ¿Quiénes pierden? La privatización en Venezuela.

En ese momento se frenó el proceso por parte del gobierno de Rafael Caldera, aunque sólo pasarían dos años para que se diera un viraje al impulsarse la venta de la Siderúrgica del Orinoco y llevar a cabo la apertura petrolera. Ahora la situación es distinta, las llamadas nacionalizaciones emprendidas por el gobierno del presidente Hugo Chávez no sólo implica una reversión de las privatizaciones, sino que también el Estado ha asumido empresas que tradicionalmente estuvieron en manos de particulares.

-¿El proceso privatizador fue una moda que impuso la primera ministra británica Margaret Thatcher? -No. Es verdad que ocurrió de una manera importante durante un período que comienza a finales de los 70, se extiende en los 80 y sigue en los 90, pero es un aprendizaje que hizo el mundo en el sentido de definir el papel que debe jugar el Estado en la economía y cuáles son las funciones que deben ser transferidas al sector privado.

Nosotros, cuando adelantamos el proceso de privatización en Venezuela hicimos un análisis y un planteamiento de qué sectores debían ser dirigidos por el sector público y cuáles debían ser transferidos al sector privado.

-Pero ahora estamos en la moda de revertir la privatización. -La reversión de las privatizaciones que se ha dado en Venezuela prácticamente es única en el mundo. -También se están viendo en Bolivia y Ecuador. -Sí, pero son casos aislados. No tienen la magnitud de lo que está ocurriendo en Venezuela. Incluso, uno pudiera decir que forman parte del radio de influencia de la revolución chavista o socialista venezolana. -¿Por qué no ha ocurrido en otras partes? -Porque los beneficios son amplios y considerables. -Pero mundialmente los movimientos antiglobalización critican esa venta de empresas al sector privado.

-Ha habido críticas. Hay casos específicos de privatizaciones en las que se cometieron errores importantes, pero de manera global esas empresas se han mantenido en manos del sector privado. Por ejemplo, con las de teléfonos hubo un proceso masivo de transferencias al sector privado y el balance que se hace hoy es ampliamente positivo para los países.

En el caso de Venezuela, me pregunto cuáles son las razones para llevar adelante el proceso de estatización. -Hay una razón, el hecho de que el Gobierno contó con recursos financieros, por ejemplo, para comprar la Cantv o La Electricidad de Caracas.

-Dado que existen los recursos financieros para hacerlo, veo que hay tres razones para llevar adelante la estatización. Primero, una razón ideológica que parte del convencimiento de que los medios de producción deben estar bajo el control del Estado; segundo, hay una necesidad de control político porque las estatizaciones son un mecanismo de control de la sociedad para evitar que se convierta en un contrapeso para el Gobierno; y una tercera razón es la corrupción, porque hay actores que ven en las empresas privadas una oportunidad de posicionarse y hacer negocios de esas empresas. Imagina lo que implica tomar control de una empresa como Cantv o La Electricidad de Caracas donde hay contratos millonarios para servicios, compra de insumos o materias primas, asesorías o publicidad. Entonces, eso se convierte en espacios para la corrupción y el clientelismo político.

-¿Las tres razones la percibe con el mismo peso o hay alguna más relevante que otra? -En algunas estatizaciones el móvil fundamental es la corrupción. -¿Un ejemplo?
-En casos como las cementeras o las empresas petroleras creo que el móvil de la corrupción ha sido más fuerte. Claro, le sirven los otros argumentos para ejecutar la acción, porque se envuelve dentro de la lógica de la socialización de los medios de producción.

-¿El control político de compañías privadas sólo deja fuera de juego a empresarios nacionales? -No solamente. También hay una cantidad de organizaciones civiles que reciben fondos, apoyos o ayudas de las empresas privadas y que ahora estarán bajo el control del Estado. -¿Se refiere a toda la ayuda que da el sector privado a programas de responsabilidad social empresarial? -Exactamente.

O esas organizaciones se someten a los lineamientos del Gobierno o desaparecen. Por tanto, las estatizaciones son mecanismos que asfixian a las ONG porque la ayuda que reciben proviene de la empresa privada. -Pero les queda el respaldo del Estado. -Y eso es un mecanismo de control político. -¿Hay algún estatización que se haya tomado por razones ideológicas?

-Creo que en el caso de las empresas del sector eléctrico privó el fanatismo ideológico y lo llamo así porque se sabe que el sector eléctrico puede funcionar bajo la dirección del sector privado. -¿Considera que faltan más estatizaciones? -Al final van considerando que todos los sectores son estratégicos y por lo tanto todo va pasando al control del Estado.

Creo que las estatizaciones se han convertido en el combustible de la revolución, porque cada vez que el Gobierno se enfrenta a un problema o a una dificultad en un sector estatiza como respuesta a esa situación, y eso le permite generar expectativas de que el problema se resolverá con esa medida. Después de un tiempo, los problemas se agravan, y la manera como el Gobierno responde es con más dosis de estatización.

-Pero las organizaciones sindicales ya no apoyan tanto esas estatizaciones. -Exactamente. Por eso creo que la revolución se metió en un callejón sin salida y no tiene destino con las estatizaciones, pero continuará con ellas para mantener esas expectativas positivas en un sector de la población, pero cada vez durarán menos porque ya hay gente que ha vivido los efectos negativos de estas medidas.

Así, el Gobierno está creando una chivera de empresas públicas, que se han ido deteriorando, en algunos casos progresivamente y en otros de una manera muy rápida. -¿El caso de Sidor, por ejemplo? -Totalmente. Por cierto, les recomiendo a los trabajadores de Sidor que lo más rápido posible vendan esas acciones al Gobierno y utilicen como argumento que creen en un socialismo más radical y por eso prefieren que el Estado tenga 100% del control de la empresa. -¿Qué se puede hacer con una chivera de empresas públicas?

-Esta gente muchas veces denunció que los procesos de privatización consistieron en la venta o regalo de empresas pública al sector privado. Ahora ellos están convirtiendo a estas empresas en unas gallinas más flacas, pues les están quitando de manera pronunciada su valor. Será difícil plantearse procesos de reprivatización por cómo van quedando las compañías y porque se perdió la credibilidad.

-¿No es contradictorio que el Gobierno insista en estatizar si los resultados no son favorables? -Es como una huida hacia adelante y continuar por un callejón sin salida. El Gobierno entró en una dinámica en la que estatiza una empresa, pero como las cosas no resultan argumenta que eso ocurre porque no se hizo lo mismo con la empresa que suministra los componentes; entonces se estatizan las compañías que están arriba y abajo de la cadena de producción.

Estoy seguro que los ministros le hacen creer a Chávez que las cosas no salen bien porque la estatización no ha sido lo suficientemente extensa y profunda. Al Gobierno le ocurre con las estatizaciones lo mismo que a un drogadicto cuando llega al tope de la satisfacción con una dosis; es decir, necesita dosis adicionales más fuertes y crecientes pero al final lo que hace es hundirse más.

-¿No ve posible que el Gobierno diga que se debe volver a un esquema de concesión al sector privado? -Lo veo muy difícil, porque al Gobierno no le interesa la rectificación y no creo que haya un sector privado que le crea en caso de que eso ocurra. La inversión privada en Venezuela se ha desplomado prácticamente a mínimos históricos.

No es asunto de votar o no votar sino de cobrar.

Ronny Padrón.
DEMOCRACIA CRISTIANA HOY.

No es asunto de votar o no votar sino de cobrar.

Comienzan los típicos movimientos de cara a las venideras elecciones parlamentarias nacionales. Al tiempo presente el socialismo gobernante consagra sus mayores esfuerzos por aprobar una ley electoral a su medida y así triunfar en su mejor estilo: ¨Ha como de lugar¨.

Nada nuevo bajo el sol. Si algo de bueno tienen diez años bajo el gobierno de un teniente coronel, es precisamente su limitación para sorprender, sin embargo, continúa venciendo donde más importa.

Viene al caso, por cuanto desde ya se sabe redivivo el grave dilema sobre el votar o abstenernos. Alternativas estas con éxitos y fracasos, unos más rutilantes otros más eficientes, sin embargo continúan sin resolver a la fecha el meollo de nuestro asunto: Restaurar la constitucionalidad democrática, perdida desde aquel 11 de abril. He allí el triunfo no negociable, la joya de una corona que estamos aún lejos de ceñir.

Revisadas una a una las tratativas en tal sentido, podemos precisar de manera objetiva la certeza de nuestra inicial afirmación. Nos falta es cobrar. Iniciando con el mismo 11 de abril, de un cobro bien ¨chucuto¨ (menos de 72 horas), hasta la reciente enmienda, con más de un millón de votos ¨por el buche¨, deportivamente aceptados por nuestra dócil dirigencia, todo parece indicar la persistencia de tal carencia.

Porque así como unos enrostran: ¿Qué ganamos con abstenernos? Refiriendo las parlamentarias de 2.005, otros bien pueden hacer lo propio respecto al RR, las presidenciales de 2.006, el referendo de 2.007 y la precitada enmienda; eventos comiciales donde las fuerzas demócratas fueron incapaces de hacer valer triunfos populares, especial mención del referendo por la reforma constitucional, resultado favorable defendido únicamente por las fuerzas militares, en ausencia de una dirigencia demócrata calificada. Precisamente por ello el régimen socialista en gobierno no dudó en desconocerlo, aprobando de inmediato leyes al margen de la Constitución.

En fin, no estará allí la diferencia. Lo sabemos sino todos, por lo menos muchos en Venezuela. Tanto del lado demócrata, como por supuesto del socialista. Igual como se conoce el hecho de nuestra mayoría popular, incuestionable desde aquel 11 de abril.

¡Pero aún sino lo fuéramos¡ igual de válido nuestro fundamento al promover la constitucional restauración, pues, el contrariar valores, principios y garantías democráticos o menoscabar derechos humanos, no es asunto de mayorías, más bien de conceptos éticos, indispensables a la convivencia civilizada de los pueblos y al logro del Bien Común.

De tal manera, que desde ya podemos advertir sobre la pertinencia de cualquier tratativa en pro del objetivo prescrito, atendiendo siempre a la necesidad de contar con buena capacidad de ¨cobro¨. Honduras construyó su camino, nosotros hagamos el propio. ORA Y LABORA.
caballeropercival@cantv.net