jueves, 13 de diciembre de 2012


Ciudad El Tigre, domingo 09 de diciembre de 2012

Ronny Padrón.

Democracia Cristiana Hoy.

 Presidenciales 2013 pero con nuevo CNE.

Ante el probable escenario de nuevas elecciones presidenciales para el año entrante, las fuerzas demócratas en Venezuela debemos tomar posiciones nuevas desde ya. Sobremanera en virtud de que nuestro liderazgo representado en la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) persiste en su paradigma de cohabitación con el régimen socialista en lugar de la resistencia democrática activa como indicaría toda lógica.

Pero es precisamente esa falta de lógica, rasgo típico del socialismo en gobierno, mala costumbre bien aprendida por la MUD -Chávez autorizado por unanimidad en la Asamblea Nacional para irse a Cuba a operarse de una enfermedad que sólo a él le consta- la que nos impone reajustar prioridades si pretendemos restaurar la Constitución a partir de esta coyuntura. Es así como en lo adelante los demócratas venezolanos tenemos la necesidad de marcar la agenda política nacional a pie juntillas con el texto de la Carta Magna, vista la intención del PSUV por eternizarse en el poder con o sin Hugo Chávez.

Considerando entonces que el mismo teniente coronel al mando designó públicamente al que habría de sucederlo, el escenario electoral 2013 se nos convirtió en prioridad. Prioridad no por las típicas razones de ganar una justa comicial, se trata de lograr un sistema electoral confiable algo de imposible cumplimiento en 14 años.

Cuando hablamos de prioridad, nos referimos a que a partir de ahora toda la actividad política de nuestras fuerzas demócratas debe concentrar su esfuerzo en tal dirección entendiendo que de ello dependerá la continuidad o no del régimen socialista en gobierno ya que el actual sistema electoral garantiza el triunfo de cualquier candidato presidencial socialista sea cual fuere su nombre.

En tal sentido adquiere especial relevancia el trabajo recientemente adelantado por un grupo de organizaciones civiles que a través de su ¨Carta Abierta a la Sociedad Democrática¨ han hecho público el denominado “Proyecto Elecciones Venezolanas Auténticas” entre cuyas propuestas destacan las siguientes: La realización de la auditoría y depuración del Registro Electoral como paso indispensable para celebrar elecciones en el año 2013, promover para el próximo 23 de enero un acto nacional por elecciones auténticas con un llamado a consulta popular sobre el sistema de votación electrónico, la urgente necesidad de la democratización y rescate del Poder Electoral, toda vez que el actual no refleja el sentir nacional.

Las anteriores pueden constituir premisas para que nuestro liderazgo demócrata nacional en específico la MUD, asuma de una buena vez el paradigma de la resistencia democrática activa a modo de lograr los objetivos políticos pautados. No esperemos mayores logros que aquellos que podamos alcanzar a través de nuestros esfuerzos, pues a los ojos del socialismo un demócrata nunca deja de ser enemigo que sólo merecerá esclavitud. ORA y LABORA.


 

Ciudad El Tigre, sábado 01 de diciembre de 2012

Ronny Padrón.

Democracia Cristiana Hoy.

No son los votos sino el coraje.

Allí en el coraje estriba la diferencia entre continuar bajo régimen socialista o restaurar la constitucionalidad perdida desde aquel 11 de abril.

Creo son pocos los venezolanos capaces de poner en duda el hecho cierto de la inacción del Comando Venezuela ante el ventajismo electoral gobernante como la causa fundamental para la derrota demócrata el pasado 7 de octubre, capítulo  más reciente en esta tragedia política que va por 14 años.

Porque la tragedia ha decir verdad no estriba en el socialismo gobernante, discursivamente inocuo, políticamente impresentable. El horror se fundamenta en el paradigma empleado por la alternativa demócrata, para confrontarlo. La cohabitación como paradigma, se basa en la sola oposición a la ineficiencia de la tratativa gubernamental, descartando la confrontación siquiera discursiva con la ideología que le da sustento, pretendiendo una normalidad democrática al tiempo que se nos esclaviza.

Ello es así en razón de la afinidad que observa en la praxis el común de la dirigencia demócrata criolla con la ideología socialista habida cuenta la cercanía de esta con el populismo democrático rentista vigente en nuestro país hasta 1998. Si a lo anterior sumamos el ¨sedentarismo dirigencial¨ derivado de la costumbre democrática entre 1974 a 1998 junto al sentimiento de culpa que aún atormenta a esa dirigencia en relación a los graves fallos ocurridos en tal período, hábilmente explotado por el socialismo en gobierno, se puede comprender a cabalidad por qué el fracasado paradigma de la ¨cohabitación¨ se mantiene en pie.

Ante ello, la mayoría demócrata nacional debe tomar decisiones. El cambio de paradigma político de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) es necesario si aspiramos vivir algún día bajo el Estado Democrático y Social de Derecho y de Justicia que pauta la Carta Magna. Resulta evidente al tiempo presente que incluso la falta absoluta del teniente coronel Hugo Chávez al frente del régimen en gobierno en modo alguno es garantía de restauración constitucional considerando como ha sido la tratativa de la MUD con ocasión de sus faltas temporales.

Es decir, ateniéndonos a esa realidad, corresponde a la ciudadanía imponer desde ya a la MUD un cambio de paradigma hacia la Resistencia Democrática Activa, más acorde con la situación presente y porvenir, habida cuenta la vocación de perpetuidad gubernativa por parte del PSUV.

Cada día bajo el socialismo es uno menos de oportunidad para vencerlo en la medida que se nos agota la independencia económica como eje de la lucha demócrata. Suprimida como fuere la libre empresa en Venezuela para dar paso al Estado Comunal, postulado cardinal del socialismo, nos resultará cuesta arriba la restitución de la constitucionalidad democrática habida cuenta que será entonces desde las entrañas del régimen donde tendría que aflorar la lucha por la libertad, y vale decir que los hermanos cubanos llevan 50 años intentándolo, sin éxito. ORA y LABORA.