viernes, 28 de junio de 2013

El Tigre, sábado 22 de junio de 2013
Ronny Padrón
Democracia Cristiana Hoy
El patriotismo y la dirigencia demócrata
¨Las cartas están echadas¨  respecto a la Mesa de la Unidad Democrática (MUD)  y esta  lucha por la restauración constitucional, por lo que resta del año. Es un hecho público, notorio y comunicacional que el máximo líder de la MUD pretende la participación demócrata en los comicios municipales del venidero 8D bajo las mismas condiciones electorales que hicieron posible el fraude en el pasado mes de abril.

Como igualmente cierta es la disponibilidad del régimen socialista en gobierno de repetir su tratativa comicial fraudulenta ahora a nivel municipal, en la medida que ello convenga a sus particulares intereses políticos, actualmente circunscritos a su necesaria estabilidad pasado el ¨susto¨ del 14 de abril, ahora en medio del caos permanente inherente a un gobierno del usurpador Nicolás Maduro Moros.

Consideradas como fueren las anteriores premisas, aunado a la inexistencia en tiempo presente de organización demócrata distinta a la MUD, proponemos, que nuestra dirigencia demócrata asentada en cada uno de los Municipios del territorio patrio asuma el evento comicial de fin de año, no como la simple reiteración del 14-A. El 8 de diciembre de 2013 debería constituirse en el episodio pendiente de una épica iniciada el 11 de abril de 2002 cuya resolución está en manos de cada venezolano demócrata en especial la de nuestros candidatos locales de la MUD.

Veamos. El pasado 14 de abril nuevamente constatamos, ahora de manera formal, que la mayoría electoral en Venezuela es demócrata, jamás socialista, sin embargo como ha ocurrido ene veces bajo esta tiranía en gobierno, nuestro liderazgo demócrata nacional resultó incapaz de ¨cobrar¨ ese triunfo electoral, convocando como debía a la protesta política, pública, pacífica y no armada, conforme a la Constitución, y optó en su lugar por hacer depender la concreción de tal victoria, de un Poder Judicial al servicio del PSUV. Los resultados son conocidos.

Ese guion fraudulento, para el venidero 8 de diciembre lo podemos hacer cambiar, sí y solo sí, cada uno de nosotros, como electores demócratas que somos, nos constituimos desde ya en garantes civiles para que a diferencia de lo ocurrido en aquellas presidenciales, los dirigentes de la MUD a nivel municipal den cabal cumplimiento a la Carta Magna ante los nuevos fraudes que puedan tener lugar en uno cualquiera de los 335 Municipios del territorio nacional.

El régimen quedó al desnudo. El PSUV nos continúa gobernando gracias a nuestra actual incapacidad como colectivo para hacernos de una dirigencia política capaz de instaurar el Estado Democrático y Social de Derecho y de Justicia consagrado en la Carta Magna.

Nuestra disposición como electores para exigir de esos candidatos a alcaldes y concejales el ejercicio pleno de su responsabilidad en defensa de la soberanía nacional expresada a través del voto, determinará la sensatez de sufragar otra vez ante un CNE hecho en socialismo. ORA y LABORA.


jueves, 20 de junio de 2013

El Tigre, sábado 15 de junio de 2013
Ronny Padrón
Democracia Cristiana Hoy
Municipales del 8D y liberación nacional
Para los venezolanos que entendemos al 11-A de 2002 como el inicio de una tiranía socialista que se ha perfeccionado en el tiempo, y que tiene por desiderátum la esclavitud de Venezuela, todo evento de política trascendencia a partir de aquella fecha representa para nosotros la nueva oportunidad para una rebelión popular que restaure la Carta Magna.

De inicio necesario es reconocer la intencionalidad del régimen en gobierno por ¨sofocar¨ la tensión política del pasado 14-A, convocando sí a los precitados comicios municipales en fecha ulterior a la legalmente debida, dispuestos como están a ¨ceder¨ espacios en ese escenario político a cambio de la estabilidad en el campo que sí les interesa ¨el poder nacional¨.

Para tal eventualidad, la tiranía socialista tiene como aliados –conscientes o no de ello- en primer término al común de la dirigencia demócrata nacional, incapacitada como está para conducir la liberación nacional mediante rebelión popular, y así se evidenció una vez más a partir del 14-A. Esa dirigencia necesita con urgencia ¨oxigenar¨ politica y económicamente a sus diezmados cuadros de nivel medio y bajo, por ende el evento municipal les resulta un botín irresistible, importándole muy poco o nada el asunto de la liberación nacional, algo sabido desde el año 2002 visto el hecho de que aceptan participar en los referidos comicios a nivel local con el mismo Poder Electoral que recién nos robó a nivel presidencial. Los ingresos municipales derivados del situado constitucional y otras transferencias o subvenciones nacionales, todas bajo el control de la tiranía socialista a nivel central, le garantizaría al socialismo la sumisión política de siempre, por parte de alcaldes y concejales eventualmente electos con el voto opositor. O cuando menos es esa su pretensión.

En segundo lugar, el socialismo en gobierno va desarrollando con eficiencia la famosa ¨hegemonía comunicacional¨ ahora bajo la modalidad de adquisiciones mercantiles de importantes medios de comunicación social anteriormente independientes, a propósito de neutralizar la capacidad del colectivo nacional para coordinar la protesta política masiva.

Sin embargo no siempre resulta todo tal como está planeado, más aun tratándose de la actividad política. El 14-A de 2013 a diferencia de otros tantos eventos electorales en los cuales el pueblo demócrata venezolano ha sido víctima del fraude, tiene la particularidad de haber ¨desnudado¨ como nunca antes la incapacidad del régimen para vencer legítimamente en comicios nacionales, gracias en mucho a una candidatura demócrata supremamente eficiente en medio de la adversidad, que fue capaz -y esto la exalta sobremanera- de hacer pública denuncia sobre el fraude cometido a manos del CNE.
A partir de entonces ha iniciado una etapa inédita en esta lucha por la liberación nacional. Ningún demócrata venezolano, intelectualmente honrado, puede argumentar ahora que la restauración constitucional descansa únicamente en la vía electoral. Tal certeza hará posible los mayores consensos entre el colectivo nacional hoy subordinado, algo que necesariamente dará lugar al nuevo liderazgo nacional, indispensable al proceso de liberación.

La precampaña y la propia campaña electoral municipal es la perfecta justificación constitucionalmente amparada, para iniciar la protesta política, pública, pacífica y no armada en contra de la tiranía socialista en gobierno, con base en el caos generado luego de 14 años, que han hecho de Venezuela un verdadero ¨infierno¨ donde lo mejor es preguntar qué es lo que todavía funciona bien.

De tal manera potenciaríamos el vigente ¨espíritu de abril¨ concatenado al actual colapso en la gobernabilidad socialista, para dar lugar así al derrocamiento del régimen aun antes del fin de año. Tal escenario dependerá en mucho de nuestra capacidad como colectivo para imponer a los candidatos demócratas de alcaldías y concejalías, el cumplimiento de su deber patrio por encima de cualquier otro interés de naturaleza política. Hagamos valer nuestra opinión y nuestro voto frente a quienes dicen representarnos. ¨Por la República de Venezuela con el espíritu del 11 de abril¨. ORA y LABORA.





jueves, 13 de junio de 2013

Ciudad El Tigre, sábado 08 de junio de 2013
Ronny Padrón
Democracia Cristiana Hoy
¿De la ultraizquierda a la ultraderecha?
Los indicios son cada vez más abundantes y las alarmas demócratas aún no se encienden. Desde el inicio mismo del régimen de facto en cabeza del usurpador socialista Nicolás Maduro Moros se habla en público y en privado sobre la tendencia militar de ultraderecha en el seno del PSUV, de considerable poderío económico, de origen naturalmente ilícito, y enorme vocación de poder político, sea en el modo formal o ¨tras bastidores¨.

El transcurrir de los meses va concediendo verosimilitud al corrillo y notamos como en menos de  30 días el régimen ha brindado 3 demostraciones públicas de claudicación política en materia económica, a saber: Primero: nuevas medidas para regular el flujo de divisas  de CADIVI, a objeto de garantizar importaciones e inversiones por parte de la empresa privada. Segundo: El llamado a negociación con el dueño de Empresas Polar. Tercero: La revocación imprevista del racionamiento en la venta de alimentos básicos para el Estado Zulia.

Considerando que es precisamente en la economía donde la ideología socialista hace descansar su principal postulado: ¨La propiedad de los medios de producción por parte del colectivo¨, los precitados eventos no son producto de la coincidencia, al contrario, reflejan una tendencia, una tendencia política más fuerte que el mismo gobierno formal. Veamos.

Es un hecho cierto e incontrovertible la crisis generalizada que abate a nuestro país hoy día, producto fundamentalmente de la previsible carencia de dólares para importar, por parte del régimen, necesarios para sostener el espejismo de gobernabilidad y derroche que durante 14 años mantuvo el tirano Hugo Chávez. El incipiente pero decidido proceso de protestas públicas por reivindicaciones salariales que el Estado socialista no está en capacidad de satisfacer, es la señal todavía pequeña de un escenario que se antoja convulso en muy corto plazo, proceso aún contenido gracias a una dirigencia demócrata colaboracionista, más pendiente de ganar alcaldías el venidero diciembre -concesión política del régimen de facto- en lugar de trabajar para merecer el poder real, aniquilando de inicio al CNE socialista, responsable directo del asalto al gobierno en cabeza del usurpador.

Así las cosas, no resulta difícil predecir para el corto plazo el ascenso al ¨poder¨ de un nuevo régimen militar, ahora de ultraderecha, que bien pudiera silenciar las más sentidas necesidades del venezolano de a pie, en torno a la inseguridad pública, inflación, escasez y desempleo, que han hecho de este país un verdadero ¨infierno¨ para sus habitantes, aplicando para ello recetas económicas ya conocidas al efecto, al costo de una mayor restricción en las libertades políticas.

Es de temer, que luego del horror que en todo sentido ha significado el socialismo en gobierno los últimos 14 años, un gobierno que llegare a brindar ¨orden¨ puede alcanzar una hegemonía política difícil de controvertir.

Para evitar la tragedia de una continuidad militarista, todos los demócratas venezolanos tenemos el deber patrio de redoblar nuestro esfuerzo diario para alcanzar la restauración de la constitucionalidad democrática, perdida de facto desde el 11 de abril de 2002. Para ello es menester propender al inicio y masificación de un proceso de protesta política, pública, pacífica y no armada, contraria al régimen de facto en gobierno, que aunado a la natural generalización de los reclamos de carácter económico ya en ciernes, debe dar lugar a un nuevo gobierno conforme al Estado Democrático y Social de Derecho y de Justicia contemplado en la Carta Magna ¡NI UN PASO ATRÁS¡ ORA y LABORA.




jueves, 6 de junio de 2013

Ciudad El Tigre, sábado 01 de junio de 2013
Ronny Padrón
Democracia Cristiana hoy
El político tiene que ser valiente
Refiriéndonos obviamente a quien pretenda ser dirigente. La valentía: Acción material o inmaterial esforzada y vigorosa que parece exceder a las fuerzas naturales; acepción aparejada con la fortaleza, virtud cardinal que según nuestra doctrina católica consiste en vencer el temor y huir de la temeridad.
Hago mención a ella, la valentía, en el entendido que ha sido su carencia por parte del común de nuestros dirigentes demócratas nacionales, causa fundamental para el ascenso y permanencia de la tiranía socialista en gobierno.

Como prueba de lo anterior me atrevo a exponer la desfachatez que ha caracterizado al régimen gobernante a lo largo de estos años, que salvo la farsa del tirano Chávez haciéndose pasar por demócrata para ganar la elección del 98 jamás ha ocultado en lo adelante su intención de esclavizarnos o en su defecto exterminarnos. Frente a ello la respuesta de nuestra dirigencia demócrata nacional ha sido siempre la misma: retroceder. Con una muy noble excepción: El 11 de abril de 2002.

Los argumentos para tan ineficiente tratativa van desde los más absurdos: ¨La natural ineptitud socialista en gobierno los hará caer por si solos¨, hasta los más elucubrados: ¨Los militares institucionalistas harán respetar la Constitución¨; siempre con un mismo resultado: La tiranía socialista continúa gobernando.

Y tal será la noticia de mañana mientras nuestra dirigencia política nacional no sea capaz de aprobar la única prueba pendiente, esa que apenas asomada el precitado 11 de abril dio lugar a la renuncia del tirano, y precisamente por la inconsistencia en su accionar propició el retorno al socialismo.

Vamos entonces a especular ¿Cuál sería la historia de Venezuela si: Carmona en lugar de huir a la Embajada de Colombia hubiera asumido con argumentos su responsabilidad política en abril de 2002?; si Carlos Ortega en lugar de asilarse en la Embajada de Costa Rica en 2003 asume con fundamentos su rol político en el Paro Cívico Nacional; si Enrique Mendoza en lugar de ¨aparecer¨ a la semana siguiente del RR en 2004 exige ¨Constitución en mano¨ y desde ¨la calle del medio¨, el reconteo público de cada voto y la auditoría de los cuadernos electorales utilizados entonces. O cuando menos si en 2007 la dirigencia nacional de otrora hubiera protestado en  público, pacíficamente y sin armas, exigiendo la publicación de la totalidad de los resultados electorales correspondientes al referendo sobre la reforma constitucional de ese año. Ello por solo mencionar eventos políticos en la primera etapa del régimen. La etapa más reciente ha sido igual de prolífica en tal sentido.

Nada ni nadie puede obligar a que un dirigente logre ser valiente, pero igualmente ningún dirigente podrá jamás impedir al pueblo el procurarse una dirigencia de valientes, indispensable cuando se trata de merecer la libertad y la dignidad nacional. ORA y LABORA.