El Tigre, sábado 19
de abril de 2014
Ronny Padrón
Democracia
Cristiana Hoy
Es
liberación, no rectificación
Hoy 19 de abril,
escribiendo las presentes líneas, resulta excelente fecha para refrescar ideas,
ante el riesgo cierto de olvido por quien
debe tenerlas siempre presentes: el pueblo venezolano. 200 años atrás los patriotas venezolanos daban
inicio a la liberación nacional de manos del Imperio español, hoy nos
corresponde mantener muy en alto las razones de esta rebelión.
A partir del 11 de
abril de 2002 con la ¨Masacre del Silencio¨ el socialismo gobernante en
Venezuela dio formal inicio a una tiranía, como corresponde a esa ideología
siempre que accede al poder. El pasado 12 de febrero, patriotas venezolanos
encabezados por Leopoldo López (hoy prisionero político) y María Corina Machado,
entre otros insignes venezolanos, unieron fuerzas con el imbatible movimiento
estudiantil dando inicio al plan de liberación nacional denominado ¨La Salida¨
que no es otra cosa sino un proceso de protesta pública, pacífica y no armada
dirigido a imponer la finalización inmediata de la tiranía socialista en
gobierno mediante cualquiera de la vías establecidas en la derogada Carta Magna
a tales efectos, a saber: Asamblea Nacional Constituyente, Enmienda
Constitucional o bien la renuncia del usurpador Nicolás Maduro Moros.
Como era lógico
prever, el socialismo en gobierno se dedicó a partir de entonces a extinguir
tal proceso político valiéndose para ello de todos los mecanismos al alcance de
una tiranía, desde los más toscos: represión física de las protestas pacíficas,
con saldo de muertos, heridos y exiliados, prisión politica para los líderes
del movimiento de liberación, sin el debido proceso judicial; hasta los más
refinados: La utilización del sector colaboracionista criollo.
Este último resulta
especialmente dañino a la causa de la liberación nacional, vista la eficiencia
de su accionar a lo largo de los últimos 12 años, cuando logró liderar al
movimiento demócrata nacional bajo el signo de un electoralismo subordinado al
régimen, solo útil para garantizar la permanencia del socialismo, con su
disfraz de legitimidad democrática otorgado por esa oposición ¨oficial¨.
Es tal la capacidad
política de este sector, que a la fecha presente, pretenden asumir la
representatividad de ¨La Salida¨ un proceso de protestas que nunca lideraron,
solo para distorsionarle su conocido objetivo político, hasta derivarlo en una
magra ¨rectificación¨ del régimen, algo de imposible cumplimiento, que les permite sin embargo sentarse a ¨negociar¨ la continuidad pacífica
del socialismo, como ha sido su costumbre. Resulta obvio
concluir sobre la esencial contradicción de ambas tratativas.
Quienes abogamos
por la liberación nacional como principal objetivo político del movimiento
demócrata venezolano, nos fundamentamos
para ello en la inviabilidad histórica del socialismo como sistema de gobierno,
axioma certificado en la Venezuela de estos últimos 12 años, tiempo marcado por
el hambre, la enfermedad y la muerte a manos del hampa, típico de esta doctrina
cuando gobierna, por ende la supervivencia de Venezuela como República pasa por
la finalización inmediata de ese régimen
y así lo proclamamos y por ello trabajamos, a ejemplo de nuestros padres
fundadores desde aquel 19 de abril de 1810. ¨Viva la República de Venezuela¨.
Ora y labora.